Idea para todo el que quiere tener una experiencia única, en un ambiente diseñado con amor, pasión y respeto por la biodiversidad. O que simplemente quieren despegarse de la rutina y conectar con la naturaleza sin renunciar a la comodidad. Aquí se brindan alojamientos únicos, con estilo diferentes, diseñado para brindar momentos inolvidables en parejas, en familia o con amigos.
En Chalet Tropical bio-hotel los chale- bungalós son pequeños apartamentos dentro de una cabaña típica, elegantemente diferenciado por colores, el Rojo Coral, Naranja Papaya, Amarillo Sol, Verde Palma, Azul Cielo y Lila Orquídea con capacidad para 2 personas.
Los chalets villas independientes: “Los Trópico” 2 – 4 personas “Concha”, 2-6 personas, “Océano” 6-10 personas, “Caribe” 8- 13 personas “Casa Taina” 6- 10 personas. Son unas encantadoras casas de 1 y 2 niveles, con terraza cubierta con vistas al jardín y piscina privada con cascada estilo jacuzzi. Totalmente equipadas con cocina completa, sala de estar, TV, comedor, patio con barbacoa, baño privado, sabanas y toallas de baño, aire acondicionado.
Chalet Tropical Village B&B es un proyecto con una decoración rústica natural de 6 búngalos/chalets únicos en su estilo, rentable en exclusivas (Suites) o simplemente por habitación (en Casa de Huéspedes). Tiene incluido un desayuno con un menú muy original, servido directamente en la terraza de su habitación, frente a unos hermosos jardines tropicales. Debajo del gran árbol en el jardín hay disponibles mesas rusticas y relajantes hamacas. Se ofrece parqueo privado gratuito, wifi, cunas y sillas para bebes, se aceptan mascotas. Con costos adicionales desayuno, almuerzo, cena, excursiones, bienestar, cenas románticas.
Excursión 5 playas en 4wheel. En la que se incluye La Hondonada, Playa Rincón y Caño Frio, Playa Rincón, Playa Breman, Playa Aceradero, La Playita. Al encontrarse fuera de los lugares típicamente turísticos, el pueblo se ha mantenido en un estilo propio dominicano formado por algunas casitas bordeadas de cocoteros y bañado por el mar en una playa salpicada de algunas lanchas propiedad de los mismos residentes de la localidad.
Se puede comer platos de pescado fresco al modo de la zona en pequeños restaurantes en la playa, y darse un refrescante baño en las claras aguas tropicales tras un paseo por el pueblo. Se puede aprovechar para ir en lancha desde allí hasta las aisladas playas Madama o Frontón para pasar un día perfecto buceando entre corales.
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